Pasaron 54 años desde que los Rolling Stones no incluyeron una canción de tanta duración en uno de sus álbumes de estudio. La última vez fue con "You Can’t Always Get What You Want" en el álbum "Let It Bleed" de 1969, que tenía una duración de 7 minutos y 28 segundos. Ahora, con "Sweet Sound Of Heaven" en su próximo trabajo llamado "Hackney Diamonds", la canción alcanza los 7 minutos y 22 segundos, siendo la segunda pista revelada del disco que se lanzará el 20 de octubre y consta de 12 temas.
Además de su longitud, "Sweet Sound Of Heaven" se destaca por contar con la colaboración de Lady Gaga en la voz y Stevie Wonder en los teclados. A diferencia del primer sencillo del álbum, "Angry", que tiene un estilo rocanrolero, esta canción es una hermosa expresión soul con influencias gospel sobre la música como fuente de consuelo. Al inicio del tema, Mick Jagger canta "Escucho los dulces sonidos del cielo cayendo sobre la tierra" tras un acompañamiento de piano blues de Stevie Wonder, quien también toca el órgano. Lady Gaga se une alrededor del minuto dos, respondiendo suavemente a Jagger y aumentando la intensidad a medida que avanza la canción. Juntos, cantan sobre la importancia de proteger a mujeres y niños del hambre y el sufrimiento, evocando una atmósfera de una iglesia del Bronx en un domingo por la mañana.
La canción parece llegar a su fin en un momento dado, pero luego Lady Gaga realiza una improvisación de más de dos minutos, destacando su talento mientras Jagger la anima con un "Vamos, vamos, vamos". "Sweet Sound Of Heaven" lleva la firma de Mick Jagger y Keith Richards, y se ha lanzado una versión más corta de cinco minutos junto con la versión del álbum.
Lady Gaga y los Rolling Stones habían colaborado previamente, pero solo en el escenario durante un concierto. La cantante de Nueva York se unió en algún momento para interpretar junto a Mick Jagger la intensa canción "Gimme Shelter". Sin embargo, su participación en "Hackney Diamonds" fue completamente casual. Mientras los Stones estaban en pleno proceso de grabación del álbum, Gaga coincidentemente estaba registrando su voz para un nuevo proyecto en un estudio adyacente. Su intención inicial al entrar en la sala donde trabajaban los Stones era simplemente disfrutar de la música. Se acomodó en un rincón, se acurrucó y observó la sesión. Cuando la banda estaba grabando "Sweet Sound Of Heaven", no pudo evitar expresar su entusiasmo con algunos "oooh, uuuuh" que se le escaparon. Mick Jagger lo notó y le propuso: "Hagámoslo correctamente". Luego le pasó un micrófono a Gaga, quien se levantó del suelo, comenzó a interactuar vocalmente con Jagger y así grabaron la canción.
Esta no es la primera ocasión en que los Rolling Stones colaboran con Stevie Wonder. La colaboración más destacada tuvo lugar en 1972, cuando la banda británica invitó a Wonder a unirse a ellos en su gira como acto de apertura. Mick Jagger y Keith Richards eran grandes admiradores de Wonder, quien se encontraba en un momento excepcionalmente talentoso ese año, lanzando dos álbumes icónicos, "Music of My Mind" y "Talking Book". La gira resultó beneficiosa para Wonder, ya que le brindó la oportunidad de actuar frente a un público masivo, en su mayoría compuesto por personas de raza blanca. Esta experiencia le ayudó a consolidarse en un mercado al que no había llegado antes. "Sweet Sound Of Heaven" es la canción que precede a la última pista en el álbum "Hackney Diamonds", un proyecto que marca el regreso después de 18 años sin nuevas canciones originales de los Rolling Stones. Además de contar con la colaboración de Lady Gaga y Stevie Wonder, en este trabajo también se pueden escuchar a otros artistas destacados como Paul McCartney, Elton John y Bill Wyman, el bajista fundador que dejó la banda en 1993. Además, se han incorporado grabaciones del fallecido baterista Charlie Watts, quien nos dejó en agosto de 2021, en dos canciones del álbum.
